LA ESTRUCTURA DE LA
TAREA EN SECUENCIAS DIDÁCTICAS TIPO
Cuando se utilicen otras
secuencias didácticas tipo, sobre todo en propuestas interdisciplinares pero no
únicamente, la estructura de tareas formará parte esencial de las mismas, ya que asegura la presencia equilibrada y
relacionada de procesos y contenidos debidamente contextualizados. Además
ofrece una estructura idónea para la concreción curricular que integra todos
los elementos que la conforman (contenidos, criterios/estándares de evaluación
y competencias) y facilita por lo tanto
la evaluación simultánea de contenidos y competencias.
De entre las diversas secuencias didácticas que
favorecen, por su carácter activo, el aprendizaje de las competencias y pueden
además integrar con facilidad la estructura de
tareas, podemos ejemplificar los
siguientes:
Aprendizaje basado en proyectos se enfoca en un problema que hay
que solucionar en base a un plan. La idea fundamental es el diseño de un
planteamiento de acción donde los estudiantes identifican el ¿qué?, ¿con
quién?, ¿para qué?, ¿cómo?, ¿cuánto?, factores de riesgo a enfrentar,
medidas alternativas para asegurar el éxito, resultados esperados, etc.,
El proyecto se desarrolla en seis etapas que se pueden organizar, por
ejemplo, en tres tareas integradas: Aprendizaje Servicio proyecto que consiste en ofrecer servicios o productos a la comunidad para aprender e implica responsabilidad social. El proyecto de aprendizaje servicio se desarrolla en cuatro fases que se pueden organizar, por ejemplo, en otras tantas tareas integradas:
Aprendizaje basado en problemas La metodología ABP es un modelo educativo en el que los estudiantes son sujetos activos de su aprendizaje. Los estudiantes, en grupos de trabajo colaborativos y autoorganizados, trabajan a partir de un problema real o creíble (realidad editada con fines educativos), identifican sus necesidades de aprendizaje y acuerdan el proceso que se ha de seguir para buscar una solución. Además de la adquisición de conocimientos curriculares, el ABP se propone el desarrollo del pensamiento crítico y facilitar al alumnado la adquisición de competencias que le permitan ser un profesional competente. Morales y Landa (2004) establecen que el desarrollo del proceso de ABP ocurre en ocho fases, que se pueden organizar, por ejemplo, en tres tareas integradas:
Se trata solamente de una
ejemplificación de posibilidades. Si la Unidad Didáctica o proyecto contiene más
de una TAREA, como es el caso en los ejemplos de secuencias didácticas
presentados, la PRÁCTICA SOCIAL en la que participa el alumnado será común a
todas ellas. Cada una de las tareas contendrá un PRODUCTO FINAL de valor
diferenciado. Este propuesta podría transferirse a otro tipo de secuencias
didácticas. La estructura de tareas aporta a todas ellas la coherencia de su
estructura integrada.